
Cuando en 1810 lo comisionan al mando del ejército libertador del Paraguay no dice “Ojo, que soy abogado, porqué no mandan a otro que sepa mas”; no, el tipo va ahí donde sabe que es útil a su patria en momentos jodidos. Sin peros, sin excusas… y sin pedir nada a cambio:
La Junta puso las miras en mí para mandarme con la expedición auxiliadora (…) admití porque no se creyese que repugnaba los riesgos, que sólo quería disfrutar de la Capital, y también porque entreveía una semilla de desunión entre los vocales mismos, que yo no podía atajar, y deseaba hallarme en un servicio activo, sin embargo de que mis conocimientos militares eran muy cortos
how to advertise for free Portland
classifieds Indianapolis
No hay comentarios:
Publicar un comentario